Consejería de Industria, Trabajo y Turismo – Toledo

En colaboración con Antonio Sánchez-Horneros Gómez

…en Contrapunto

1996
El edificio que se proyecta para la Consejería de Industria y Trabajo, se concibe desde la relación entre funcionalidad y representatividad.
El aspecto de la funcionalidad como sentido esencial del espacio, que aloja trabajadores del sector servicios, se resuelve mediante la diafaneidad del espacio y el confort interior. El edificio se defiende de los rigores climáticos del Sur mediante una barrera de gran inercia térmica.
La idea de trabajar al aire libre bajo la sombra de un árbol en una zona climáticamente agresiva especialmente en verano, es la metáfora adecuada para el edificio que se diseña.
Así se proyectan dos grandes prismas, A y B, de dos plantas sobre rasante con fachadas diáfanas y de gran luminosidad, unidos mediante un núcleo de vestíbulos.
Ambos prismas de fachadas ligeras se adosan a sendos muros de gran inercia térmica orientados al suroeste y se proyecta un tercer módulo yuxtapuesto al vestíbulo principal con los servicio públicos de mayor relevancia, un salón de actos y una cafetería.
Los dos grandes prismas respiran a través de patios y lucernarios superiores, permitiendo luz natural filtrada a los puestos de trabajo.
Así, el conjunto evoca una simbiosis entre los grandes elementos enumerados y los ligeros contrapuntos, soportando noblemente la representatividad que es exigible a un edificio de la Administración Pública Regional.
El sistema de apoyo mediante muro de inercia está constituido por el muro de material cerámico con capacidad de acumulación de calor y ciclo de descarga y calentamiento de seis en seis horas
El muro se encuentra atravesado por huecos con compuertas electromotrices comandadas mediante un reloj temporizador y un sensor de temperatura exterior, controlados por ordenador y programa informático.