2008

Valladolid quintaesencia de lo castellano: sobriedad, contundencia, caridad, verdad…, donde el lenguaje es tan lleno de aristas que resulta cristalino. Ciudad de hidalgos arruinados y labradores altivos. Donde la semana santa es un auto sacramental y las dos Españas siempre estuvieron alerta. Valladolid. Ciudad fundadora de naciones y naciones estado que se proyectaron al Non Plus Ultra. Valladolid. Ciudad donde nació un servidor. Niebla. Frío. Sabañones. Mil veces en clase no se habla. Rosarios del mes de Mayo y Ave María Purísima, Hijo de que te acusas… Ayer.

Hoy, ciudad cosmopolita, capital de Castilla y León y motor de la industrialización de su región y espejo de su marco cultural.

Un edificio prismático y rotundo como la arquitectura de Juan de Herrera. Fuerte y lleno de aristas, que se abren a la ciudad en un abrazo de cuerpos en “L” que se maclan en el espacio sobre un plinto “unidos”.

El cuerpo de plinto que esta volcado hacia fuera, en contacto, transparente, con la ciudad, y hacia dentro en unos recintos de jardín en patio interior, que horadan las 4-5 alturas, llenando de luz y vistas fugadas los espacios interiores.

Este plinto se macla con dos cuerpos que emergen componiendo una “L” y donde se sitúan en oficina-paisaje los dos servicios principales de la Administración: Dirección provincial del INSS y de la TGSS.

En resumen, un edificio que se protege de las vías y el poniente, y se abre hacia el este y la ciudad.

Un atrio donde los ciudadanos: trabajadores, empresarios y funcionarios se pueden encontrar para resolver sus problemas y celebrar la convivencia.